Sería como un pequeño lugar de egocentrismo en el edificio "Yo" de la calle "Siempre".Un sitio donde jugar a quererme sea una ley y esté obligada a no llorar. Donde mis sueños se hagan realidad solo con cerrar los ojos. Un santuario. Un lugar pequeño y seguro en un mundo de egoísmo. Como un oásis en un cálido desierto; como un beso entre mis lágrimas. Un reducto de paz donde podría parar a pensar en como ser mas felíz. Donde el dolor no existiera. Donde las lágrimas se negaran a salir por miedo a molestar. Un pequeño rincón de amor propio.

19.12.10

¿Para qué enamorarme? Si siempre es la misma historia.
¿Para qué jugarme por alguien? Si después te deja sola porque se cansa de estar con vos. 
¿Para que tratar de olvidar? Si cuando lo estas logrando, la persona que amas, vuelve a aparecer. 
¿Para que pensar que todo va a cambiar? Si siempre pasa lo mismo, te dice que te quiere y es todo mentira. 
¿Para qué jugármelas por él? Si después se olvida de todo lo que paso. 
¿Para qué esperar a la persona mas importante de mi vida? Si hay miles de chicos que valen la pena, MÁS que él. 
¿Para qué ilusionarme? Si sé que no va a pasar nada. 
¿Para qué esperar? Si sé que no va a volver. 
¿Para que lo quiero? Si sé que él no! 
¿Para que le digo que si? Si al final lo de él es un juegito, aunque SIEMPRE diga "Le voy a decir NO" y cuando aparece, no me puedo resistir. 
¿Para qué caemos a sus pies? Si despues dicen que sos RAPIDITA/TROLITA/PUTITA, pero ellos no se imaginan lo mucho que una lo ama y lo mucho que desearía poder estar con él, ya que son unos inmaduros de mierda.


Los hombres de hoy son TAN estúpidos, que no valen la pena perder el tiempo con ellos. La verdad es que desconfío de todos los chicos que hay a mi alrededor. Son personas concretas de las cuales sé que no se confunden con lo que quieren o por lo menos se la juegan por una mina sin importar el rechazo. Nunca tuve un novio por eso, porque siempre vi la mierda de personas que son, lo mente podrida que tienen, lo infantiles/chiquilines/inmaduros que son. Porque hoy en día, no hay ni un puto hombre que digas: ESTE VALE LA PENA. Y me da vergüenza!