- Te odio, sos insoportable. Deja de reírte de mí, ¡desaparece!* Ok, si me lo dices así, me voy.
- Espera, ¡no!
* ¿¡No qué!?
- ¡Que no te vayas!
* Pero si me lo acabas de pedir. Y además, me odias.
- Sabes que no te odio, que te quiero, que no te soporto, pero te necesito, que me molesta que rías de mí, pero a la vez me encanta porque demostras que me prestas atención y quiero que desaparezcas.. Pero conmigo.