Yo me pregunté ¿Hasta cuando te querré como hasta hoy?
Vos me enseñaste llorando que de nada sirve el adiós.
Podré caerme a pedazos, pero acá siempre estás vos.
Me gusta lo que no tengo y quiero lo que no doy,
No me comprendo a mí misma.
No se entregarte la vida, tampoco vivir sin vos.