Si encontrás algo más fino que el filo de tu silencio, sólo entonces te amaré. Rebuscada tu respuesta, tanto como tu cabeza, tenías que ser hombre. Yo sólo quería unos mimos, un suspiro de tu ombligo, una sopa con sabor. Eras un rompecabezas disfrazado de príncipe, eras puro rock and roll.